El Sector de Barbastro cuenta con nuevas agendas comunitarias en dos de sus equipos. Son los equipos del Centro de Salud de Ainsa y del Centro de Salud de Castejón de Sos del Sobrarbe y la Ribagorza.
Ambos Centros de Salud en zonas rurales en el Pirineo nos demuestran que a pesar de las dificultades se puede tener una orientación comunitaria clara en su forma de prestar los servicios que realizan, así como una búsqueda de la mejora constante en esta área.
La zona de salud de Ainsa es una zona con gran dispersión geográfica y con múltiples municipios donde viven menos de 50 personas, y algunas de estas poblaciones con difícil acceso y con población altamente envejecida.
Al leer su agenda ves el planteamiento de acciones comunitarias que buscan coordinarse con otros recursos locales y que tratan de abordar las distintas etapas de la vida y favoreciendo la autonomía de las personas y colaborando por las iniciativas locales y muy vinculadas al territorio.
Lo mismo ocurre con la zona de Castejón de Sos. En su trabajo está la intersectorialidad, la importancia del equipo de trabajo, así como la búsqueda de la acciones coordinadas para responder a las necesidades de la población con la que trabajan y de la que son parte.
La importancia de la atención comunitaria en el medio rural queda patente en la agenda de Castejón de Sos.
No es fácil mantener coordinación, cuando un centro de salud tiene tanta dispersión, con asociaciones, distintos centros escolares o mantener un esfuerzo por la comunicación al equipo para ser participes todas las personas que lo integran de los proyectos en los que el centro anda enredado.
Enhorabuena a ambos equipos. Mucho que aprender de vosotras y vosotros en todo Aragón y un ejemplo para la atención comunitaria en el mundo rural.